Claudia Sheinbaum, presidenta electa de México, ha delineado una serie de proyectos de infraestructura que buscan impulsar la conectividad y el crecimiento económico del país. En su agenda se contempla la continuidad de obras ferroviarias clave como el Tren Maya, el Tren Interoceánico y el Tren de pasajeros México-San Luis Potosí-Nuevo Laredo, enfocadas tanto en el transporte de personas como de mercancías. Estos proyectos se enmarcan en la estrategia para mejorar la movilidad y la integración logística nacional, apoyando la interconexión entre distintas regiones y polos productivos.

No obstante, dentro de esta estrategia, también se prioriza el desarrollo de la infraestructura carretera, un componente esencial para el transporte de mercancías. Con ello, se busca mejorar la red vial existente y generar nuevas oportunidades económicas, incrementando la competitividad y facilitando la logística en diferentes sectores industriales.

El documento «100 Pasos para la Transformación» detalla algunas de las acciones que buscan modernizar las carreteras del país y, en particular, apoyar el transporte terrestre de mercancías, lo cual es crucial para la cadena de suministro de diversos sectores. Este artículo se enfoca en los aspectos que directamente afectan al transporte por carretera y a la logística de carga, que serán clave para capitalizar la tendencia global del nearshoring y fortalecer la logística de México en la cadena de suministro norteamericana.

Infraestructura y habilitadores clave para el desarrollo regional en la administración de Sheinbaum

En la visión de Sheinbaum, el desarrollo regional es uno de los pilares para alcanzar un crecimiento económico equilibrado. Para apoyar este crecimiento, se contemplan una serie de habilitadores clave que incluyen:

1. Infraestructura logística, como carreteras, caminos, puertos y aeropuertos.
2. Infraestructura de telecomunicaciones.
3. Suministro de servicios básicos (agua, energía eléctrica, gas natural).
4. Normatividad ambiental enfocada en el desarrollo sostenible.
5. Desarrollo y vinculación de profesionales y técnicos, con el fin de asegurar una fuerza laboral especializada que soporte el crecimiento de los sectores estratégicos.

El desarrollo de infraestructura carretera se alinea con la estrategia de relocalización o nearshoring, que busca atraer inversión internacional a México y fortalecer las cadenas de producción regionales, reduciendo la dependencia de importaciones de Asia.

Relocalización y Nearshoring: Oportunidad para México

El fenómeno del nearshoring, que consiste en acercar las cadenas de producción a los mercados de consumo final, representa una oportunidad sin precedentes para México. Con la inestabilidad de las cadenas de suministro globales, muchas empresas están optando por trasladar su producción a América del Norte, y México se encuentra en una posición privilegiada para aprovechar este cambio. Factores como la estabilidad macroeconómica, la amplia red de tratados comerciales, la infraestructura logística existente y la fuerza laboral joven y especializada hacen que México sea un destino atractivo para los inversionistas.

Bajo la cuarta transformación, la relación económica con Estados Unidos y Canadá ha alcanzado niveles históricos en comercio e inversión. En 2022, las exportaciones mexicanas hacia los socios comerciales del T-MEC alcanzaron un valor de 488,170 millones de dólares, un aumento del 31% respecto a 2018. Las inversiones de ambos países en México también crecieron un 48% en el mismo período. Como resultado, México ha desplazado a China como el principal socio comercial de Estados Unidos.

La inversión extranjera directa de estos países también ha aumentado significativamente, con una fuerte integración de las cadenas de suministro en sectores clave como el automotriz, eléctrico y electrónico.

Ante este contexto, los proyectos de infraestructura carretera en el plan de Sheinbaum buscan garantizar que México pueda atender la demanda creciente de transporte de mercancías, facilitando tanto la exportación como la producción regionalizada dentro del marco del T-MEC.

El desarrollo regional y la definición de las vocaciones productivas por entidad federativa permitirán dar continuidad al enfoque centrado en el desarrollo de las cadenas de valor de los sectores prioritarios para América del Norte, con el objetivo de lograr la sustitución de importaciones de Asia.

Los principales sectores de la política industrial

Los principales sectores de la política industrial que se promoverán en la nueva administración son:

1. Semiconductores.
2. Electrónica.
3. Electromovilidad.
4. Dispositivos médicos.
5. Agroindustria.

Los 10 corredores industriales

La estrategia incluye la creación de 10 corredores industriales especializados, donde se pretende mejorar la infraestructura carretera y generar oportunidades logísticas que impacten directamente en el transporte de mercancías. Estos corredores, que abarcan diversas regiones del país, están destinados a fomentar la producción local y la exportación a mercados internacionales, como Estados Unidos y Canadá. Los corredores son los siguientes:

1. Transístmico (Oaxaca, Veracruz, Tabasco y Chiapas): Energías renovables, manufactura especializada, agroindustria y logística.
2. AIFA (CDMX, Estado de México, Hidalgo): Dispositivos médicos, químico-farmacéutica, logística, manufactura especializada y alimentos y bebidas.
3. Golfo (Veracruz, Tabasco, Chiapas, Campeche): Petroquímica, hidrocarburos, madera, frutícola y pesca.
4. Pacífico (Nayarit, Jalisco, Colima, Michoacán): Agroindustria, industria 4.0, logística y turismo.
5. Frontera Norte (Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas): Autopartes, manufactura y agroindustria.
6. Baja California (Baja California, Baja California Sur, Sonora, Sinaloa): Semiconductores, energías renovables, turismo y agricultura.
7. Bajío (Querétaro, Guanajuato, San Luis Potosí, Aguascalientes): Automotriz, centros de datos, aeronáutica y turismo.
8. Maya (Yucatán, Chiapas, Tabasco, Campeche, Quintana Roo): Turismo, agroindustria, energías renovables, alimentos y bebidas, servicios.
9. Centro (Guerrero, Morelos, Puebla, Tlaxcala): Textil, automotriz y eléctrico-electrónico.
10. Noroeste (Sonora, Sinaloa, Durango, Zacatecas): Minería, agricultura y generación eléctrica.

Estos corredores están pensados para optimizar la distribución de bienes y mejorar la eficiencia del transporte de mercancías, tanto en el mercado interno como en las exportaciones.

Desarrollo de la infraestructura carretera

El plan de infraestructura carretera incluye la construcción, ampliación y remodelación de importantes tramos de la red vial federal. Estas obras son fundamentales para mejorar la movilidad de carga y facilitar la interconexión entre los polos productivos y los mercados de consumo, tanto nacionales como internacionales.

Proyectos Carreteros
El plan de Sheinbaum también incluye varias obras de modernización y construcción de carreteras en zonas estratégicas del país, con el fin de mejorar la conectividad entre los principales centros industriales y de consumo. Entre los proyectos más importantes se encuentran:

• La modernización de la autopista México-Querétaro, una de las vías más transitadas del país y crucial para el comercio entre el norte y el centro de México.
• La ampliación de la carretera Monterrey-Nuevo Laredo, que es fundamental para el transporte de mercancías hacia Estados Unidos, dado su papel como una de las rutas más importantes de exportación.
• El desarrollo de nuevas rutas en el sureste del país, en apoyo al Corredor del Istmo de Tehuantepec, una obra estratégica para fomentar el comercio interoceánico y reducir la dependencia del Canal de Panamá.
• La creación de vías de acceso y mejora en el mantenimiento de carreteras en áreas de producción agrícola e industrial, facilitando la salida de productos hacia los puertos y fronteras.

Otros Proyectos de Infraestructura y Transporte

Además de los proyectos enfocados en el transporte de mercancías por carretera, el plan de infraestructura de Sheinbaum contempla también otros desarrollos significativos en áreas relacionadas con el transporte y la logística. Entre ellos se encuentran:

• Proyectos ferroviarios: Se incluye la continuación de obras importantes como el Tren Maya, el Tren Interoceánico y el Tren de pasajeros México-San Luis Potosí-Nuevo Laredo, que buscan mejorar la conectividad intermodal y fomentar el turismo y el transporte de carga en regiones estratégicas.
• Modernización de puertos: La expansión y modernización de puertos clave como el de Veracruz y Manzanillo, que serán fundamentales para fortalecer el comercio marítimo y reducir cuellos de botella en la entrada y salida de mercancías.
• Desarrollo aeroportuario: Se prevé el fortalecimiento de la infraestructura aeroportuaria en diversas regiones del país, con la modernización de aeropuertos clave que facilitarán la conectividad aérea, especialmente para la carga internacional.